Rehabilitación cardíaca: fase 1


Rehabilitación cardíaca: fase 1

La fase hospitalaria o también denominada fase 1 de la rehabilitación cardíaca tiene una duración de una a dos semanas. Esta destinada a minimizar los efectos que conlleva el reposo prolongado e instruir al paciente.

Intervención fisioterapéutica preoperatoria

La fisioterapia juega un rol importante en la rehabilitación de un paciente cardíaco en la etapa pre- como postoperatoria. Existe un alto porcentaje de pacientes que desarrollan complicaciones a nivel pulmonar luego de una cirugía cardiaca. Sin embargo, hay formas de prevenirlas: clave es la fisioterapia respiratoria. Los objetivos de ésta son mejorar la ventilación pulmonar y el intercambio de gases, fortalecer el músculo respiratorio principal (diafragma), minimizar disnea, facilitar la eliminación de secreciones bronquiales y aumentar la tolerancia al ejercicio físico. Por otro lado, se debe aprovechar el tiempo para informar al paciente sobre su futuro tratamiento y practicar como debe manejar las nuevas circunstancias. Preparar al paciente adecuadamente antes de su operación garantiza una buena y rápida recuperación.

Antes de empezar a trabajar se debe realizar una anamnesis amplia. Cuan mas completa es, mejor se va a poder personalizar el tratamiento. Cada uno tiene condiciones diferentes que hay que tomar en cuenta. En la anamnesis se deben incluir los datos patronímicos, antecedentes personales como familiares, afecciones osteoarticulares y del aparato respiratorio, y cuales son sus síntomas. Otras herramientas para valorar al paciente, es la observación y el examen físico. Se debe prestar atención a la posición y aspecto físico en el cual se encuentra, el color de la piel, el patrón respiratorio. En el examen físico la tomar presión arterial, frecuencia cardiaca y frecuencia respiratoria. Auscultar, fijarse si tiene anemia y si las extremidades están edematizados.

El paciente se encuentra ante una situación nueva y muy estresante. Por lo cual, es fundamental informarle sobre el proceso de rehabilitación. Pero no solo al paciente, también se deben incluir a familiares. En el caso que no se encuentran parientes cercanos, hablar con el acompanante sobre los cuidados.  Es imprescindible dedicarle suficiente tiempo a esta etapa y asegurar que la nueva información sea comprendida. El paciente tiene derecho a ser informado.

Antes de la operación ensenamos al paciente (si se encuentra en las adecuadas condiciones):

Respiración diafragmática

Tos eficaz

Espiración forzada (huffing)

Transferencias

Ejercicios activos

Respiración diafragmática

El primer paso es que el paciente realize su patron de respiración, recién después la va a poder modificar correctamente. Debe estar relajado y sentado en una silla o acostado en decubito supino. Luego se pedirá que coloque una mano sobre su tórax y la otra sobre su vientre y respire de forma natural. Este va a sentir el movimiento de sus manos. La gran mayoría utiliza más los músculos accesorios de respiración que el diafragma, por lo tanto la mano sobre el tórax se va a desplazar mas que la otra. Después de darse cuenta de esto, se deberá trabajar para fortalecer el diafragma. Consiste en inhalar por las fosas nasales, con el fin de filtrar, humidificar y calentar el aire que entra, y exhalar por la boca. Para ayudarle, hacer respiración asistida, en la cuál el fisioterapeuta acompana al diafragma. El paciente lo deberá practicar varias veces al día.       

Tos eficaz

La tos es un mecanismo de defensa y  de mantenimiento de higiene de las vias aéreas. Se debe inspirar casi la capacidad pulmonar total por la boca. Luego se produce un incremento de la presión intratoráxica debido a la contracción abdominal para realizar la espiración forzada. Si como consecuencia de la tos se produce un esputo, se denomina productiva. Postoperatorios de cirugía cardíaca deberán abrazarse al momento de toser.

Espiración forzada (huffing)

Es una técnica que favorece la expectoración, se realiza con la boca abierta una espiración forzada con la glotis abierta.

Transferencias

El paciente se tiene que mover con mucho cuidado las primeras semanas. Debe evitar de todas maneras las maniobras de valsalva (con glotis cerrada). Cada vez que se levanta, se sienta o realiza otro esfuerzo que conlleve mucha presión intraabdominal debe soltar el aire por la boca. Para que lo entienda se le puede explicar que “ debe chistar en todos los esfuerzos ”. Si se encuentra en condiciones apropiadas se puede practicar varias veces. Lo otro que debe hacer en cada maniobra de esfuerzo es abrazarse a si mismo. Corregirlo si solo se agarra de los brazos, tiene que agarrar sus costillas. Previene que el tórax se expande demasiado y así cause dolor. Importante aclarar que tambien lo debe hacer si otra persona le asista.

Ejercicios activos

La inmovilización puede producir debelidad muscular y trastornos circulatorios entre otros. Cuanto se debe mover dependen de las limitaciones del paciente y los sintomas que presenta. Los movimientos básicos que cada uno deberá hacer son ejercicios metabólicos. Abriendo y cerrando las manos mejora la circulación de los MMSS debido a la continua contracción y relajación de los musculos. Asi se puede prevenir la edematización de los miembros la cual se observa en un gran porcentaje de pacientes en reposo. Lo mismo en los MMII: se activan los gemelos (también llamados “segundo corazón”) realizando flexo- extensión de los tobillos. Así se favorece el retorno venoso hacia el corazón, se previene la formación de trombos y edemas.

Intervención fisioterapéutica postoperatoria

El objetivo fundamental será restaurar la expansión torácica y facilitar la eliminación de secreciones. Técnicas de fisioterapia para lograr lo último son: vibraciones, drenaje postural y el ciclo activo. Vibraciones solo se pueden realizar con mucho cuidado y recién 72 hs después de la cirugía.

Ciclo activo:

3 respiraciones diafragmáticas

3 respiraciones normales

3 respiraciones con espiración asistida

3 huffing

El ciclo se deberá repetir tres veces y al final toser para eleminar secreciones. Para pevenir que el paciente hiperventile indicarle que haga movimientos activos de manos y tobillos entre los pasos (ejercicios metabólicos). Recordar de auscultar al paciente antes y después.

Una buena hidratación mantiene las secreciones fluidas y facilita de tal manera su expulsión.

Repito brevemente los cuidados que el paciente debe tener durante las primeras semanas:

Utilizar faja (no es necesaria cuando esta acostado).

Abrazarse en el momento de transferencias, tos y ante esfuerzos que incluyen aumento de presión intratoraxica.

Espirar con la boca abierta al realizar esfuerzos.  

Además de los ejercicios respiratorios es importante realizar actividades cardiovasculares para una correcta rehabilitación cardíaca. En la fase 1 el paciente debe empezar a deambular lo antes posible, primero distancias cortas e ir progresando lentamente. Siempre tiene que caminar acompanado y es favorable que lo haga varias veces al día. Por otro lado, no debe estar acostado por tiempo prolongado. En el día se debe sentar en un sillón y solo acostarse para dormir.

Volver a sus actividades cotidianas es el objetivo de los pacientes cardíacos. La fisioterapia es una gran herramienta que ayuda a lograr esta meta.